miércoles, septiembre 06, 2006

L’Estany Clar

Desde que leí la crítica del cocinero Jordi Cruz en Descubrir Cuina, quería ir a su restaurante L’Estany Clar. Pero lo cierto es que como nos pilla retirado, no terminaba de decidirme. Gran error, porque realmente es un sitio donde merece la pena ir, y cuanto antes mejor, porque seguro que le dan otra estrella el dia menos pensado y se pone imposible.

Exactamente se encuentra en la Carretera C-16 Km. 99,4 En Cercs (Berga), no es tan complicado como parece, en realidad es bastante sencillo llegar y si llamas al 938 220 879 que es su número de teléfono, te explican detalladamente como acceder al restaurante. Yo no me perdí, así que es fácil.

El sitio es precioso, dentro de un marco incomparable,(como dirían los cutrepresentadores de algunos programas de televisión pero esta vez con razón) rodeado de verde, se encuentra una casona antigua, en medio de la montaña. El comedor es amplio, con decoración rustica, acorde con las paredes de piedra y el lugar donde se encuentra.

Aunque no somos muy dados ha tomar el menú degustación, creemos que cuando vamos a un sitio de este estilo, que tiene una estrella Michelín , su cocinero varios premios, y además te tienes que desplazar exclusivamente para ir, en ese caso, si es lo más recomendable, y así podemos hacernos una idea de la mayoría de los platos.

El menú constaba de tres aperitivos que hacían referencia a la brasa,

  • Brou d’albergínia a la llenya amb regalèssia i eucaliptus (Caldo de berenjena a la leña con regaliz y eucalipto)
  • Pop gallec amb infusió de pebrots i escumós de patata a la llenya (Pulpo gallego con infusió de pimientos y pumoso de patata a la leña)
  • Llom de sardina amb fum, cruixent de tomàquet, formatge de cabra i alfàbrega (Lomo de sardina con humo, crujiente de tomate, queso de cabra y albahaca)

Seguimos con pequeñas raciones de:

Les postres,

Y les petit fours

  • Piruleta de cacao y piñones torrados
  • Trufa “conguito” a la naranja
  • Gominola àcida de albaricoque

Este peazo de menú costó 53€ por cabeza

De beber pedimos, aconsejados por el sumiller un Chablis Grand Regnard 2002 chardonay. Un vino perfecto para acompañar el menú, fresco, frutal, con toques minerales y una acidez muy equilibrada. Muy rico. (35,50€) Luego pudimos acabar los farcells de vedella con una copa de Torresilo del 2000. Que también estaba muy bueno y por el módico precio de 3€ la copa.

No puedo hablar de cada uno de los platos, porque para todos serían los mismos adjetivos, muy bueno, estupendo, riquísimo, perfectamente elaborado y quedaria un poco repetitivo. Resaltaria el montaje del plato de el “lomo de Sardina” porque venía en un bol con humo dentro tapado con una especie de papel film agujereado para que este fuera saliendo poco a poco y la sardina encima, tan tierna que se podia partir sobre del plastico y en el punto justo de ahumado.
En cuanto a los platillos no sabría con cual quedarme, todos estaban deliciosos y mantenían, la misma linea. Igual que los postres.
Quizá lo peor debido al nivel de los otros platos fueron los petit fours pero no por malos, si no por poco originales. Pero es por poner un pero.
La gente del servicio encantadora y muy correcta. Todo perfecto. Si no estuviera tan lejos seguramente que volvería.

Lrk.

Nota de la fotógrafa(por si alguien mira mis fotos detenidamente):Mi nivel de Photoshop es nulo, es decir, que aunque hice fotos a todos los platos, entre que da cosa en un restaurante lleno de gente y la poca luz, la mitad salieron mal, solo pude salvar las que he puesto y no están muy allá. Se puede observar que la de el restaurante esta cutremente retocada por el Paint, ya que salían unos señores y no quería que me denunciasen por derechos de imagen. Advertencia: Solo aceptaré críticas constructivas sobre este tema.

domingo, septiembre 03, 2006

Pechugas Escabechadas Con Naranja


Cuando voy a comprar pollo, sin ninguna idea definida de que voy ha hacer con él, solo pensando que me puede salvar una cena rápida, siempre lo pido a cuartos y abierto para la plancha. Somos tres, si mi “Mini yo” quiere pollo él siempre se come un muslo y un sobre muslo (ese es mi campeón) pero nada más. Mi Maxi, con eso no tiene ni para empezar así que se come lo mismo y un trozo no muy grande de pechuga, así que siempre me acabo comiendo yo la mitad de su pechuga, además de la mía correspondiente, que no digo que no me guste, pero a la plancha, queda seca y termina resultando cansina…

Total, que “hartica” como estoy de comerme siempre la pechuga pensé en pedir que me la deshuesaran, pero dejando un trozo con el hueso, (rosigar si me gusta, y con un poco de chicha más) y el trozo deshuesado que lo dejaran entero para escabecharlas.

QUE GRAN IDEA!!

Normalmente el escabeche lo hacía colocando las pechugas en una cazuela con tres partes de aceite de oliva y una de vinagre, 1 cebolla partida a trozos, orégano, un par de dientes de ajo sin pelar, una hoja de laurel, unos granos de pimienta negra y una pizca de sal. Bien tapado y a fuego lento durante 20 minutos que se fuera haciendo poco a poco y ya. Están buenísimas así...

Hasta el domingo pasado.

Quería probar algo nuevo, pero que no me diera mucha faena, (mi Luna particular necesitaba que también le dedicara parte de mi tiempo) y no se si habría leído algo por ahí o que inconscientemente me acordé de la receta de Marisa pero cambié el cuento. Primero , sal pimenté las pechugas y las doré vuelta y vuelta en un poco de aceite de oliva. Cuando estuvieron doraditas las saqué y las reservé. Luego cogí medio puerro, una zanahoria y una cebolla no muy grande, lo piqué pequeñito y lo puse a pochar en una cazuela en el mismo aceite, cuando tenía ya color y estaban blanditas las verduras le añadí una pizca de pimentón de la vera, la hoja de laurel, unas ramas de romero fresco, medio vaso, de los de agua de vinagre Louit al estragón, medio vaso, de zumo de naranja natural (en este caso dos naranjas exprimidas) y un vaso de aceite. Añadí entonces las pechugas que quedaron bien cubiertas por el escabeche. Tapé y las dejé a fuego muy lento 20 minutos. Y luego con la cazuela destapada otros 20 minutos. Después las dejé enfriar y las guardé en la nevera.

En dos palabras IM-PREZIONANTE.

Quedaron buenísimas, con el toque del vinagre pero el final dulce de las naranjas. Además yo me las comí en ensalada, con unos trocitos de piña natural y un surtido de lechugas (rúcula, lollo rosso, hoja de roble, brotes de escarola, canonigos… en fin de ese tipo), con el jugo de la piña y el escabechado de las pechugas hice la vinagreta y quedó riquísima. Luego se le puede añadir lo que una quiera pero para mi así es suficiente.

La ensaladita de pechuga escabechada y tu trozo de pechuga a la plancha y parece que no, pero eso ya es otra cosa.

Lkr.