Este es uno de mis platillos preferidos. Siempre que encuentro unos calamares de buen tamaño la pongo en práctica, y aunque inicialmente es una receta de la Sra. Ruscalleda, la voy readaptando continuamente, según la temporada y lo que haya en la despensa, haciendola más mia, aunque en esta ocasión fui bastante fiel a la receta original, únicamente cambié las setas, que ella le pone Rossinyols (rebozuelos en castellano, Cantharellus cibarius en latín) y Ceps (Boletos en castellano o Boletus edulis , en latín) y yo sin embargo, le puse un bote de surtido de setas variadas, que compré en el Condis de debajo de mi casa, y que me hacía el servicio oye!!.
Entonces, se necesitan para cuatro personas:
- 4 calamares de buen tamaño
- 1 bote de surtido de setas (no tienen que ser los del Condis de debajo de mi casa) o bien
- 400 gr. de rebozuelos y 400 gr. de Boletus
- 2 tomates maduros rallados
- 1 calabacín pequeño y 1 puerro cortados en juliana
- perejil y 1 diente pequeño de ajo, todo bien picadito.
- 1/2 copa de fino
- AOVE
- Sal y pimienta
Primero, se limpian bien los calamares, teniendo cuidado de no mancharlos con su tinta e intentando que no pierdan la piel. En una sartén de tamaño adecuado, con aceite bien caliente se marcan por cada cara incluyendo las patas, tiene que ser un salteado rápido, no más de tres minutos. Se reservan. En la misma sartén se van salteando, primero el ajo y perejil e inmediatamente se añade el puerro. Se reserva. Después el calabacín. Se reserva, también. Y por último las setas, si son frescas lo mismo, salteadas y ya. Las mías como eran de bote tardaron un poco más. En principio el salteado de las verduras necesita aproximadamente tres minutos para cada cosa.
Con todo esto mezclado, comenzamos a rellenar los calamares de manera que quede bien apretado el relleno. Se cierran con un palillo y se corta por la mitad con cuidado, así se agiliza la cocción, y se van colocando en la bandeja del horno, no demasiado juntos, donde ya habremos puesto el tomate rallado. Se añaden las patas de los calamares, se salpimienta, se le hecha un hilillo de aceite, la media copa de fino y se mete en el horno, ya bien caliente, durante 4 minutos a 190º.
Luego se reparte bien en los platos que todo el mundo tenga su calamar con sus patitas y se riega con la salsa resultante de la cocción del tomate rallado, el fino y los juguitos que han ido soltando los calamares..
El resultado es una receta ligera, aunque no te quedas con hambre, y con los sabores de cada producto muy definidos debido a las cocciones rápidas que se han hecho.
Lkr.

