viernes, julio 21, 2006

El Meme De La Tortilla

Yo creo que se me nota que me gusta lo de participar en memes, que le voy hacer, pero además,¿Cómo no voy a participar en este.? ¡A VER!!
Lo malo es que yo siempre hago la tortilla igual y no quería repetir, así que, como cuando puse mi post sobre ella, se abrió un mini debate de si estaba mejor con leche o sin leche, con levadura o sin levadura... yo me plantee el hacer una cata de tortillas una con y otra sin leche. Y ¿que mejor momento que este? Así que ahí va.

LA CATA DE TORTILLAS.


Con los siguientes ingredientes:

  • 1/2 Kg. de patatas
  • 4 huevos
  • una cebolla tierna no muy grande
  • un vaso grande de aceite de oliva
  • sal
Me puse a ello, oye.

Primero, puse el aceite a calentar, añadí la cebolla bien picada con el cuchillo, a fuego medio. Mientras se hacía la cebolla pelé las patatas y las corté a rodajas finas. Hecha la cebolla la escurrí para que soltara el aceite y la coloqué en un cuenco hondo. Comencé a freír las patatas en tandas, batí los huevos en el mismo cuenco donde estaba la cebolla y fui añadiendo al huevo las patatas fritas debidamente escurridas de aceite. Una vez acabadas de freír todas las patatas, me dispuse ha hacer la primera.

En una sartén pequeña que tengo, como para hacer una tortilla individual o para dos que no comen mucho, a ojo de buen cubero, dividí los ingredientes y la hice como mandan los cánones; A fuego medio-fuerte con una cucharada del mismo aceite en el que había frito la cebolla y las patatas hice la primera sin más aditivo que mi amor y a la segunda le añadí como suelo hacer siempre un chorrito de leche.

El resultado visual es este:











Esta es la primera sin leche ni na ni na. La segunda con leche.

La primera me quedó menos dorada por fuera y menos líquida por dentro, y aunque si babeaba un poco a simple vista me pareció que no era suficiente para mi gusto. La segunda babeaba más y quedó más doradita...Pero de lo que se trataba era del sabor. nopisto decía que para él, la gracia está en que babee pero con la textura de yema de huevo, que verdaderamente es la que a mi me gusta.

And de winner is…

¡¡¡LA QUE NO TIENE LECHE!!!

Nopisto tenía razón.

Curiosamente era más pequeña y quedó menos liquida, pero la textura y el sabor era más cremosa y gustosa. La que SI lleva leche quedó más gorda, también estaba jugosa pero era menos sabrosa, más sosa , como más liquida. Le faltaba esa cremosidad que él decía, y que en mi humilde opinión, si tenía la primera, aunque se pueda mejorar (dicho sea de paso).
El que lo hiciera todo en el mismo plato fue por ese motivo, para que la única diferencia que pudieran tener fuera la leche, a pesar de arriesgarme a que una quedaran de diferente tamaño.
Así que ¡a Dios pongo por testigo que NUNCA le pondré leche a mis futuras tortillas!!.

(Nopisto, gracias por el consejo)

Lkr

jueves, julio 20, 2006

Conejo Asado Al Estilo Del Bar Pinotxo


Cuando mi "Mini yo", todavía no empezaba a ser un preadolescente mareante, es decir hace cosa de un par de Navidades, nos fuimos a pasear a la Boquería. Pensé que podía ser curioso que viera la gran variedad de productos, sobretodo pescado, que se pueden encontrar en el emblemático mercado y más en Navidades. Después del paseito y como estaba en edad de crecer, me lo llevé a desayunar al Bar Pinotxo, y nos metimos entre pecho y espalda "Unos chipirones salteados con alubias blancas de Santa Pau" y como el niño se había quedado con hambre un plato de "Capipota".

Salimos encantados, con la comida y con la simpatía de Juanito el “alma mater” del Bar. Seguimos paseando y en la librería del mercado vendían el libro "Pinocho. La vida y la cocina en la Boqueria de Barcelona" Así que lo compré.

Desde entonces, si quiero que coma conejo, lo tengo que hacer como pone en la receta de este libro.
He de decir que a él no le hacía mucho el conejo pero desde que tenemos a Muxu, se convirtió en una lucha imposible a la que yo ya hacía tiempo que me había rendido. Y eso que a mi me encanta el conejo. No me comería a mi Muxu pero a sus primos me los como sin contemplaciones.


Ingredientes

  • 1 Conejo
  • 2 Zanahorias peladas y cortadas en rodajas
  • 2 Puerros
  • 1/2 Cabeza de ajos pelados
  • 1 tomate maduro
  • 1 manojo de hierbas aromáticas
  • 1 copa de brandi
  • 1 vaso de vino rancio (yo le pongo oloroso)
  • 1 puñado de pasas
  • 1 puñado de piñones tostados
  • Harina
  • Sal y pimienta
  • Aceite de oliva
Este es mi Muxu.


Primero se salpimienta y enharina el conejo y se fríe en la cazuela (yo utilizo una de barro) con el aceite caliente. Cuando está doradito se retira y reserva. En esa misma cazuela y aceite donde se ha hecho el conejo se sofríen las verduras, junto con el manojo de hiervas aromáticas, las pasas, los piñones y el tomate a trocitos. A media cocción de las verduras y las hierbas, se incorpora el conejo y se deja cocer durante unos 10 minutos, pasado este tiempo se riega con el brandi y se flambea hasta que se apaga la llama. Inmediatamente después se vierte el oloroso (o vi ranci) y se tapa la cazuela, dejando el conejo al fuego otros 5 minutos. Estos últimos controlando, que no quede demasiado seco, si es menos, tampoco pasa nada.

Y ya está. Queda meloso y con un punto dulzón aportado por las verduras y los licores pero muy rico, fácil de hacer y sobre todo que no tengo que hacer comida aparte para mi “Mini yo”, o prepararme para la pelea. Al contrario, le encanta.

Lkr

domingo, julio 16, 2006

HEMC #1: Sopa fria de tomate y langostinos.

Desde La olla suiza nos propone el primer evento culinario de hecho en mi cocina (hemc) y una que se apunta a todo y más si se trata de hacer cosas fresquitas participa con una Sopa fría de tomate y langostinos.

Esta sopa, es una adaptación de una receta de mi admirada Carme Ruscalleda que se llama "Sopa fría, pan con tomate y gambas" y que a su vez parece ser que es una adaptación o "Similar al Salmorejo cordobés" Menos mal que en definitiva el resultado es excelente porque tanta adaptación...da un poco de miedo, lo se.

MIS INGREDIENTES:

  • 1 Kg. de tomates maduros
  • 1 diente de ajo pequeño
  • 1 cebolla tierna pequeña
  • 1/2 pimiento verde
  • 250 ml de AOVE (en este caso Hojiblanca)
  • 25 ml de vinagre de módena
  • 10 ml de vinagre de jerez
  • 1 moya de pan Bimbo
  • 1 cucharada de mostaza "Dijonnaise"
  • Sal y pimienta al gusto
  • Un bastón de panadero (de esos que se les da a los niños, cuando va la mamá a comprar el pan, y que se tiene que partir porque es más grande el bastón que el niño) Ese.
  • 1 tomate rallado, aceite y sal
  • 8 langostinos (son los que yo puse, pero vaya, que como eso es guarnición puedes poner los que quieras, seis, cuatro…uno no, que para dos platos lo veo poco)
  • unas hojitas de menta fresca.

Se lava toda la verdura y se parte a trozos, se van triturando, ajo, tomates, cebolla, pimiento, pan, aceite, vinagres, la cucharada de mostaza, la sal y la pimienta. Tiene que quedar cremosa. Se reserva en la nevera. Mientras, se pone a hervir en agua salada, las colas de los langostinos, sin pelar, alrededor de 30 segundos, pasados los cuales se sacan y se refrescan rápidamente en agua helada para cortar la cocción. Se pelan y se reservan. El bastón se parte a modo de picatostes, (yo hice dos trozos, y al final en el plato lo tienes que partir más pequeño, con el riesgo de que te salte la sopa en cima. Luego cada cual que haga lo que quiera yo ya lo he advertido) y se moja en el tomate rallado que tendremos ya preparado con su aceite y un poquito de sal.
Y ya está, servimos la sopa, colocamos los bastones, los langostinos y unas hojitas de menta fresca, que además de dar color le da todavía más frescura al plato.

A mi que ha quedado así.

La señora Ruscalleda en su receta comenta que a esta misma sopa también le puede ir bien en vez de las gambas (ella pone gambas) pues, olivas negras o una buena conserva de atún, marisco escaldado tibio como berberechos, almejas, mejillones o langostinos. O un picado de las mismas verduras que tiene la sopa...
Hoy viendo Duelo de Chefs Paco Valladares, le ponía a su salmorejo unos trozos de crujiente de jamón, y creo que esa va ha ser mi opción para acabarme la poca sopa que ha quedado.
Lkr.

jueves, julio 13, 2006

Adios Horno. Adios (y II) - Rodaballo -

Tenia el rodaballo, esta vez de tamaño apropiado para dos traga aldabas como nosotros, y no podía hacerlo de otra manera, porque le dije al pescadero que me lo limpiase, y lo dejase entero para hacer al horno, de hecho intenté partirlo yo en casa, pero no fui capaz.

Así que como era lo último que haría en el horno en todo lo que queda de verano, ¡tenia que ser por todo lo alto.!!
No innové. La otra vez me salió rico, así que lo hice igual, solo que como este era el doble de grande, en vez de hacer las patatas a lo pobre, corté las patatas, cebollas y pimientos verdes a rodajitas finas, los ajos partidos por la mitad y colocados estratégicamente por en medio de las patatas.Todo en crudo.Encima coloqué el rodaballo, sal un buen chorro de AOVE, y eso si, hice caso a Marisa y le puse el zumo de un par de naranjas, y la verdad es que le da un toque diferente, como más ligero. Me gustó.
Bueno, una vez precalentado el horno 10 minutos a 200º y todo preparado, lo metí a 180º, durante 20 minutos, y salí corriendo del calor de mi cocina. Pasados estos, le añadí un poco de vinagre y los imprescindibles ajitos fritos que esta vez sofreí con un poco de cebollino y se lo añadí por encima. Horno a 170º cinco minutos más, y listo.
Quedó bueno. Nada complicado y hecho prácticamente de la misma manera que la vez anterior, pero como en aquella ocasión no puse fotico, este lo quería enseñar. Y así me he despedido de mi horno por la puerta grande. ¡OLE!!

Esta vez maridamos el animalico con un As Sortes 2004. Cuando lo probé en una muestra de vinos, me encantó y eso que estaba embotellado para la ocasión, aunque lo sacaba ese mismo año. Esta vez, lo encontré más serio. Un vino con una nariz expresiva, que mejora con aireación, donde destaca la mineralidad, los cítricos y con leves recuerdos a flores blancas y algo de levaduras. En boca es untuoso, largo, con una acidez marcada y agradable. El final es largo y vuelven a estar presentes los minerales. Nos gustó mucho, sobre todo porque íbamos con un poco de miedo ya que en días anteriores lo habíamos tomado en un restaurante y no lo encontramos tan bien. Creo que es porque no lo debían tener bien conservado porque desde luego el que nosotros tomamos, acompañó valerosamente al rodaballo.

Lkr.

domingo, julio 09, 2006

Adiós Horno, Adiós. (I) –Salmonetes al horno-

La madre de mi Máxi, que es una mujer sabia, ya me lo dijo cuando arreglábamos la casa. “Nena tu no seas tonta y que te pongan un aire acondicionado en la cocina.”

Que razón tenía!!. Y aunque lo intenté no hice suficiente fuerza y ahora me arrepiento.

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El otro día pasé por la pescadería del Corte Ingles, que una, para algunas cosas es muy lista que para otras, sabe que a las ocho, más o menos, de la tarde suelen traer pescado fresco de la lonja, así que me di una vuelta a ver que veía.

Terminé comprando unos salmonetes, para hacer al horno. Y mientras los compraba un rodaballo me miraba con ojos golositos, así que, también fue a la saca.

Ese día no tenían mucha faena (porque si tienen mucha gente no lo hacen) y me los limpiaron. En realidad yo quería que me quitasen las escamas y lo que hicieron fue limpiármelos por dentro y dejarme las escamas… Que le vamos ha hacer. Cuando llegué a casa las limpié yo y tampoco dan tanto trabajo, porque eso si, es un pescado riquísimo, pero tienes que descamarlo bien porque tienen muchas y duras.

También tiene bastantes espinas. Pero de esas cada uno se encarga en su plato. O si no te vas al San Pau que tienen un plato de filetes de salmonetes sin una espina que valga!!

¡Tan contenta que estaba yo con mi compra!!.

Cuando llegué decidí hacer primero los salmonetes ya que los hago de una manera muy sencilla, para resaltar precisamente el sabor del pescado. Con lo cual la frescura del mismo es lo más importante.

Empiezo. Con los salmonetes bien limpitos y salpimentados, los reservé en la nevera. Mientras, escaldé tres tomates maduros, los pelé y corté a cuadraditos. Reservé también. Después piqué un par de dientes de ajo junto a unas ramitas de perejil. En ese momento enciendo el horno a temperatura media.(18oº)

Mientras el horno se calienta y yo empiezo a sudar la gota gorda, engraso con aceite la bandeja y coloco los salmonetes, espolvoreo bien, con el ajo y perejil primero y reparto el tomate alrededor. Un poco de sal y se cubre todo con pan rallado.

Riego, entonces con aceite, si es AOVE mejor que mejor, un poco de vino blanco y se mete todo en el horno aproximadamente entre 15 y 20 minutos. El tiempo es relativo según el tamaño de los salmonetes pero sirve de referencia el hecho de que los ojos se les vuelven blancos.

Quedaron muy buenos. Pero la temperatura de la cocina empezó a subir hasta el punto de que en una décima de segundo que habríamos la nevera para cojer cualquier cosa o bien beber agua fresquita para evitar la deshidratación de la cocinera… la temperatura de ambas dos (yo y mi nevera) subían por momentos. Y que yo no me quejo, que hay quien paga por ir a una sauna…Pero si se me estropea mi nevera, un cabreo seguro que pillo.

Fue en ese preciso instante cuando mientras se hacían los salmonetes decidimos que lo último que íbamos ha hacer al horno seria “ese peaso de rodaballo español” que teníamos en la nevera…

Lkr.